d'aquí |
"El veredicto general de la sociedad positiva se llama "me gusta". Es significativo que Facebook se negara consecuentemente a introducir un botón de "no me gusta". La sociedad positiva evita toda modalidad de juego de la negatividad, pues esta detiene la comunicación. Su valor se mide tan solo en la cantidad y la velocidad del intercambio de información. La masa de la comunicación eleva también su valor económico. Veredictos negativos menoscaban la comunicación. Al "me gusta" le sigue con más rapidez la comunicación conectiva que al "no me gusta". Sobre todo, la negatividad del rechazo no puede valorarse económicamente.Transparencia y verdad no son idénticas. Esta última es una negatividad en cuanto se pone e impone delcarando falso todo lo otro. Más información o una acumulación de la información por si sola no es ninguna verdad. Le falta la dirección, a saber, el sentido. Precisamente por la falta de la negatividad de lo verdadero se llega a una pululación y masificación de lo positivo. La hiperinformación y la hipercomunicación dan testimonio de la falta de verdad, e incluso de la falta de ser. Más información, más comunicación no elimina la fundamental imprecisión del todo. Más bien la agrava. (p. 22-23)La confianza solo es posible en un estado medio entre saber y no saber. Confianza significa: a pesar del no saber en relación con el otro, construir una relación positiva con él. La confianza hace posibles acciones a pesar de la falta de saber. Si lo sé todo de antemano, sobra la confianza. La transparencia es un estado en el que se elimina todo no saber. Donde domina la transparencia, no se da ningún espacio para la confianza. En lugar de "la transparencia produce confianza" debería decirse: "la transparencia deshace la confianza". La exigencia de transparencia se hace oir precisamente cuando ya no hay ninguna confianza. En una sociedad que descansa en la confianza no surge ninguna exigencia penetrante de transparencia. La sociedad de la transparencia es una sociedad de la desconfianza y de la sospecha, que, a causa de la desparación de la confianza, se apoya en el control. La potente exigencia de transparencia indica precisamente que el fundamento moral de la sociedad se ha hecho frágil, que los valores morales, como la honradez y la lealtad, pierden cada vez más su significación. En lugar de la resquebrajadiza instancia moral se introduce la transparencia como nuevo imperativo social." (p. 91-92)
Byung-Chul Han. La sociedad de la transparencia. Barcelona, 2013. Herder.
Catalogació: al costat de l'anterior, a la prestatgeria dels rellegibles i citables. Un llibre útil per reflexionar sobre la meva relació familiar, Facebook i la política al mateix temps és una meravella. I només 95 pàgines!
Si hi hagués una casella on clicar un "m'agrada" no crec que ho fes. I mira que m'ha agradat la descoberta del Byung-Chul. Només començar a llegir-lo, en la teva entrada anterior, em va venir al cap Heidegger, i Nietszche, és clar. Aquest fraseig esmolat i rítmic, de dalla segant el camp que pertoca, l'únic possible, el d'avui...
ResponEliminaI com és d'extraordinari, això d'aconseguir convertir-se en quelcom tan difícil com un filòsof alemany. Extraordinari i esperançador: encara sóc a temps d'esdevenir un poeta xinès; per dir una il·lusió equivalent.
Oi tant que faré cas del teu boca-orella ;)
Heidegger i Nietszche formen part indispensable del bagatge d'en Byung-Chul. Ditxós tu que només vols esdevenir poeta xinès, servidora, que pretenia ser Crazy Horse ho té més fotut :P
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